sábado, 21 de enero de 2017

Sons of Anarchy (Hijos de la anarquía) 2008-2014



Hace dos semanas que terminé de ver la serie, y todavía me sigue rondando por la cabeza, son unos personajes muy difíciles de olvidar.

Llevo muchos años viendo series y muchas de ellas, la mayoría, de una gran calidad, independientemente de si han recibido premios a lo largo de su vida en pantalla o no, algo que en realidad no considero importante.


Pero puedo afirmar que esta es una de esas series cuyos protagonistas se han grabado a fuego en mi corazón.

Debería darle las gracias a su creador Kurt Sutter por su idea, por crear estos personajes tan humanos, tan violentos, tan llenos de pasión, por crear unos guiones perfectos. Unos guiones que durante estas siete temporadas nunca han decaído, nunca, llenos de giros y sorpresas, dejando al público con el corazón en un puño en múltiples ocasiones, consiguiendo que cuando acababas el capítulo te dejaba rumiando como los personajes iban a solucionar tal o cual problema, o sufriendo con ellos. También riendo, que no todo es drama, de vez en cuando había alguna que otra situación cómica.

Esta serie gira alrededor de una banda de moteros del sur de California. Un club, fundado en los años 60, concretamente en 1967, que subsiste gracias a los turbios negocios que mantienen con otras bandas. Y, evidentemente, circulan en moto, en Harley Davidson, por supuesto, y todos van con sus chalecos de cuero con la parte trasera su emblema, Sons of Anarchy y una calavera.

El personaje principal es sin duda, Jackson "Jax" Teller, interpretado por el actor británico Charlie Hunnam. Jax desde su nacimiento y desde que tiene uso de razón, sabe que un día será miembro del club, ya que su padre, John Teller fue uno de sus fundadores, y su madre Gemma, es una ferviente fiel al club y a sus leyes y jerarquía interna.

Comienza la serie con un joven Jax treintañero que tiene que llevar de urgencias a su novia embarazada porque está a punto de dar a luz mucho antes de tiempo y además con el agravante de que es drogaadicta.

Durante estas siete temporadas, Jax tendrá que lidiar con sus parejas, con sus decisiones personales y las del club, con su padrastro, Clay Morrow, el nuevo presidente del club, con su madre Gemma, una mujer de armas tomar. Jax se reencontrará con su amor de adolescencia, Tara, quien lucha por alejarse de él.

Esta serie no es solamente la historia de un club motero, en esta serie se habla del amor verdadero, de la amistad que a veces es más fuerte que los lazos de sangre, de traiciones, lealtad, racismo, machismo, sexo, y de violencia, mucha violencia.

Otro elemento importantísimo es la banda sonora de la serie, que me ha descubierto grandes canciones y también versiones nueva de canciones antiguas, al igual que algunos nuevos artistas.

La serie se estrenó en Estados Unidos en septiembre de 2008 y terminó en diciembre de 2014, hace justo dos años. Yo me enteré de su existencia hace relativamente poco, este verano pasado, y aunque al principio empecé a verla con bastantes dudas, porque el tema no me llamaba nada de nada. Fue gracias a los comentarios de unos amigos que me convencieron de que tenía que verla, necesité dos o tres capítulos para engancharme realmente.

Creo que dentro de unos meses volveré a verla...


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